Fuente: Observador
Con la aprobación de la ley de Tránsito y Seguridad Vial en 2007, el máximo de alcohol en sangre permitido al conducir fue decreciendo gradualmente: de 0,8 gramos pasó a 0,5 y en 2009 a 0,3. A eso se suma ahora la política alcohol cero, algo que el gobierno anunció que empezará a aplicar desde mediados de mayo. Pero la política antidroga en el tránsito no abarca solo el alcohol, y es entonces que entre los objetivos de la Unidad Nacional de Seguridad Vial (Unasev) para 2015 se encuentra la incorporación de controles de consumo de cocaína en conductores.
Según explicó a El Observador el director de Unasev, Pablo Inthamoussu, los controles se realizarán con los mismos aparatos con que desde hace un tiempo se realizan pruebas de cannabis. Para empezar con la nueva sustancia solo falta la certificación de la Facultad de Química acerca de la fiabilidad de esa tecnología para verificar la cocaína.
Si bien en 2014 la Unasev adquirió unos 3.000 aparatos que controlan tanto el consumo de cannabis como el de cocaína, según Inthamoussu, la inversión deberá continuar, ya que pueden utilizarse solo una vez. Sin embargo esos controles aún no son masivos –tarda 8 minutos en hacer efecto el reactivo– y se realizan solo cuando hay sospecha del consumo de esas drogas. El dispositivo mide la presencia de la droga a través de la saliva.
Se trata del “mismo esquema de razonamiento y trabajo para el control del cannabis”, dijo el director de Unasev, y aseguró que, al igual que con el control del alcohol, se definió “una estrategia gradual de incorporar otras drogas”, entre las que también entrarían medicamentos como los tranquilizantes o psicofármacos que puedan tener riesgos para la conducción. Ello es posible, explicó Inthamoussu, a medida que avanza la tecnología. El Ministerio del Interior comenzará el control ni bien esté certificada la eficacia de la tecnología y las intendencias se incorporarán según lo entiendan necesario. Otro de los objetivos estratégicos de la Unasev para 2015 es trabajar en “unificar los criterios para la suspensión y rehabilitación de conductores”.
Otros controles
Dentro del Plan de Acción para 2015 de Unasev se destacan cinco puntos: mejorar la gestión de la seguridad vial, las vías de tránsito, hacer a los vehículos y a los usuarios más seguros y dar una mejor respuesta a los siniestros. Según su director, una de las debilidades detectadas es cómo hacer cumplir las normas, sobre todo para los considerados factores de riesgo, que son la velocidad, el cinturón, el uso de drogas o el casco, por lo que será clave para Unasev contar con Policía de Tránsito en todo el país. Otra prioridad es lograr el permiso único de conducir y avanzar en una prueba única en todo el país. Se trabajará además en conjunto con el PIT-CNT para evaluar la posibilidad de reducir las horas de conducción al trabajar.
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