Los datos surgen de un estudio elaborado por La Agencia Europea de Seguridad y Salud en el Trabajo(EU-OSHA) y el Instituto Sindical Europeo (ETUI), que pone de manifiesto abiertas diferencias entre los sexos en el ámbito laboral.
Cuando EU-OSHA examina los accidentes de trabajo con enfoque de género, observa que siguen diferentes patrones: mientras en los hombres los accidentes son más numerosos pero disminuyen con la edad, en las mujeres se mantienen estables en las diferentes cohortes de edad.
Los accidentes más habituales entre las mujeres son resbalones, tropiezos y caídas (29%).Sin embargo, los accidentes laborales de estas características ocurridos en la administración pública, la educación y el sector salud -sectores que concentran más del 45% de las mujeres ocupadas en Europa- no computan. Esto deja en tierra de nadie un volumen elevado de los percances laborales que más afectan a las mujeres.
Los sectores feminizados más desprotegidos
En cuanto a la exposición a riesgos ergonómicos, tanto EU-OSHA como ETUI plantean la necesidad de incorporar nuevos criterios a la evaluación, que permitan reflejar problemáticas típicamente femeninas como la exposición a vibraciones en la industria manufacturera que afectaría al 30% de las mujeres ocupadas, la realización de movimientos repetitivos o el levantamiento de personas (actividades de cuidado y sanitarias). Cuando se trata de levantar o mover personas la prevalencia del riesgo es mucho mayor en mujeres (11 %) que en hombres (5,8 %). En lo relacionado con la exposición al ruido también es necesaria una actualización: mientras que la industria afecta masivamente a los varones, sectores altamente feminizados como la docencia, la restauración, los call centers o las urgencias hospitalarias, las mujeres están expuestas a altos niveles de ruido que resienten de manera considerable su salud.
La exposición de las mujeres a sustancias peligrosas sigue siendo uno de los campos en los que es necesario un mayor esfuerzo de visibilización de los riesgos. Según EU-OSHA: “las mujeres son mayoría en los sectores que están en contacto con sustancias infecciosas y químicos nocivos para la salud, pero estas exposiciones son a menudo pasadas por alto”. Estos segmentos son tradicionalmente femeninos: limpieza, tintorerías, industria ortoprotésica, artes gráficas, laboratorios, peluquerías, sanidad o manufactura textil.
Fuente: mujeres&cia